Friday, September 01, 2006



Carmesí

Me siento en uno de los tantos asientos del parque, observo a mi alrededor y el silencio ronda en esta noche silenciosa, mi abrigo negro me cubre del frio que cae, me siento y recuerdo sus ojos, tan brillosos y llenos de alegria, recuerdo sus movimientos suaves y las miradas que timidamente me dirigía, el calor me vuelve al cuerpo como una taza caliente de un rudo café negro.
"te extraño" es lo primero que se me viene a la mente, sacudo mi cabeza en reproche y subo mi vista a las estrellas que palidas en el cielo me miran con melancolía. Recuerdo tus labios rojo carmesí distinguiendose por sobre todo tu cuerpo, un cuerpo sencillo pero a la vez hermoso y radiante de felicidad.

Pensar que te tuve entre mis brazos tan solo unos segundos, unos segundos eternos en donde pude sentir tu aroma suave, tu ser, tu simpleza, tu armonía. Pensé en esos segundos como sería mi vida contigo, y por primera vez en mi vida sentí que podría ser una vida feliz llena de armonía y de equilibrio. Pero el abrazo terminó, volví a la realidad la cual es una realidad distante y fria, donde tú caminas de la mano con otra persona, donde mis sueños murieron, donde mi esperanza de volver a encontrar alguien como tú se perdió en lo más profundo de mi alma...todo por mi estupido miedo a no decirte mis sentimientos.

En mis sueños imagino el momento, tú y yo jóvenes, tú sostienes mi mano con fuerza y me sonries tiernamente, tu belleza va mas allá de lo físico y eso me cautiva, toco tu suave mejilla y te digo sin miedos lo que siempre anhelé decirte en persona "te amo".

Ahora no se si seas feliz con esa persona, no sé si alguna vez anhelaste escuchar esas palabras de amor saliendo mi boca, no sé si alguna vez me deseaste, no se si estás feliz con tu vida...lo unico que si sé es que esta noche, sentado bajo las estrellas recuerdo una vez más tus bellos labios color carmesí y la melancolía de este hombre viejo vuelve a brotar.